La aproximación de san Miniato a la educación de los niños

El tema de la identidad de los niños y de las potencialidades que en ella reposan sigue siendo un tema largamente desatendido, pero – aunque sea natural pensar que la atención a los niños sea uno de los fundamentos del proyecto de futuro – la atención de la política no se centra casi nunca en esta perspectiva y, aunque hasta los economistas han aclarado que invertir en los niños representa una promesa para un más alto nivel de desarrollo y bienestar económico para nuestras sociedades, se sigue mirando a los niños como material interesante solo cuando se asocia a las desigualdades sociales. Y así muchos servicios para la infancia son aún, en muchas realidades y en muchos países del mundo, servicios pobres para niños de familias pobres y mientras de ésta manera las desigualdades se vuelven un tema de interés público, queda al margen el interés por la única vacuna posible contra las desigualdades y su reproducción inter-generacional, es decir, la inversión sobre las potencialidades de los niños des de los primeros años de vida.
La experiencia de San Miniato sobre la educación de los niños representa en este marco la consecuencia de factores privilegiados concomitantes, como la constancia en el tiempo de la sensibilidad política, la riqueza de las elaboraciones científicas y pedagógicas que han apoyado el desarrollo de las experiencias y la fuerza de la energía que la comunidad ha sabido expresar consolidando en definitiva justamente dentro de ella misma la responsabilidad de la educación de sus ciudadanos más pequeños. El protagonismo de los niños en el proceso de su propio crecimiento y en el desarrollo de sus relaciones, conocimientos y aprendizajes destaca de esta manera como aspecto peculiar y característico de la “aproximación de San Miniato” a la educación de los niños, junto con la evidencia de la fuerza y de la densidad de la identidad que los niños ponen en juego en cada situación en la que sea rico (no necesariamente costos) el marco de las oportunidades que se les ofrecen para su experiencia.
Toma forma de esta manera – por fin – la idea que el reconocimiento de la identidad y de las potencialidades de los niños sea la base entorno a la cual construir un proyecto de educación en el que la riqueza (no necesariamente cara) de las oportunidades se vuelva la esencia de un currículum abierto a lo posible. El volumen busca explicar esta experiencia con las palabras, con las imágenes y con los materiales audiovisuales recogidos en el CD que lo complementa. Esperamos que esto favorezca una comprensión profunda de la experiencia, incentivando también aquellos intercambios con otras realidades que des de siempre han alimentado la capacidad de reflexión, de desarrollo y de cambio.

Aldo Fortunati es Presidente del Centro de Investigación y Documentación sobre la Infancia La Bottega di Geppetto de San Miniato y Director del Área Educativa del Instituto de los Innocenti de Florencia. Experto en educación y en políticas para la infancia ha realizado actividades de formación, ha dirigido programas de investigación y ha desarrollado proyectos de experimentación innovadora en el sector de los servicios para la infancia en numerosas realidades toscanas, italianas e internacionales.